Es habitual que el término hórreo nos evoque las regiones de Asturias y Galicia. Una construcción especial para guardar y conservar los los alimentos alejados de la humedad y de los animales. Algo que hoy con nuestras casas y modos de vivir nos resulta ya prácticamnte innecesario. La sorpresa para muchos es encontrar hórreos en Navarra.
Como explica el video en el enlace que os dejo arriba , hay actualmente veintidós muestras de este tipo de arquitectura rural tradicional. De ellos, el mayor número se conserva en el Valle de Aezkoa
Nuestro recorrido por los hórreos
Todavía nos queda visitar el maravilloso Valle de Aezkoa. Esta tarea la tenemos pendiente. Como tantas otras. El patrimonio cultural es interminable… El primer hórreo que visitamos fue el de Iracheta
Construído en piedra, resulta imponente. Fue una localización magnífica para la fotografía de Borja Centenera y Clara Frago . aunque Clara en esta ocasión dedicó mas tiempo al video. La vista a este hórreo supuso una reflexión sobre lo que hoy nos cuesta entender el uso y función de construcciones que , como esta, han caído en desuso. La restauración y su imponente aspecto invitan a curiosear. También el hecho de que mantenga la escalera, se pueda subir y por tanto ver el espacio de la parte superior. Borja pudo disfrutar sacando fotos como esta
El tiempo era perfecto, nos acompañaba la luz, la temperatura, y el magnífico marco del pueblo de Iracheta. Un lugar, como toda la Valdorba que os invitamos a visitar.
… Y seguimos por Urraul Alto …
Una de las cosas que mas ilusión nos hace a todo el equipo de Patrimonio para jóvenes es ayudar a descubrir lugares. Que el patrimonio no caiga en el olvido por desconocimiento. Y todos se llevaron una sorpresa en Urraul Alto
Para algunos que nos acompañaron este día, era la primera vez que veían un hórreo. Eso podía ser lógico entre los que llegaban de Nicaragua, Estados Unidos, Perú… pero curiosamente, para algunos navarros, también era la primera vez. Y para los que habían ido a Iracheta, la segunda. El paisaje y todo el conjunto monumental impactaban . Tuvimos además la anécdota, y la suerte de tener una explicación sobre la razón por la que no pueden subir los ratones hasta arriba
Alguien preguntó si no podían trepar. José Antonio Rodriguez, biólogo, al que podéis ver al fondo a la derecha, nos explicó como se mueven los ratones. Fue un momento que tuvo su gracia y su curiosidad.
Antes de comernos un par de empanadas y de disfrutar del café calentito en la hospedería, estuvimos paseando por el claustro y viendo la iglesia
Además nos acompañó Natalia , natural de un pueblo cercano, Imirizaldu. Ella nos contó que recordaba sus juegos de niña alrededor del hórreo de Santa Fe.
Durante esta excursión anuncié la todavía lejana actividad de Octubre: La visita al retablo de San Julián de Ororbia teniendo como eje principal de la visita la moda en la época de ese retablo y en sus representaciones. Pero el tiempo va rápido y eso ha pasado ya… y será el tema de la próxima entrada. Mientras tanto, visitad al menos virtualmente los hórreos navarros y dejaros sorprender por los entornos que hoy os presento por aquí. Hasta la próxima