En marcha en 2025
Tras un 2024 verdaderamente intenso y precioso, nos ponemos de nuevo en marcha. Patrimonio para jóvenes se ha consolidado como asociación y como referente entre las entidades culturales juveniles, pero es necesario seguir adelante y generar nuevos públicos. Tras doce años de andadura, muchos de nuestros asociados se nos han hecho mayores, viven en Madrid, Paris, Barcelona o Niza . Eso es estupendo porque tenemos una amplia red de asociados profesionales por todos los rincones, pero también es verdad que necesitamos generar nuevos públicos para que vuelvan a crecer y, en definitiva, todo siga renovándose y creciendo. Eso significa vivir.
Por esta razón, porque necesitamos generar nuevos públicos, organizamos esta primera salida con un recorrido sencillo y breve. Un día de diario, de esos que quedan a caballo entre el año nuevo y la fiesta de reyes, unas fechas que desde años nos vienen dando mucho juego.
¿Cómo no recordar aquellos viajes a Vitoria y su museo de Bellas Artes, a los humedales de Salburua, la visita a la pintura mural con motivos de navidad al Museo de Navarra ( por cierto que este enlace recoge cuestiones interesantes respecto a la comunicación de los museos) o aquel primer sábado de enero en el Museo Diocesano de Jaca?
Esta vez y para inaugurar el 2025 optamos por un paseo en un tramo cortísimo del Parque fluvial del Arga, pero con una riqueza en cuanto al patrimonio cultural realmente llamativa.
El Molino de Caparroso, el puente de la Magdalena, dos cruceros, un tramo del Camino de Santiago, el convento de las josefinas y una noria de sangre
¿Quién da más en tan pocos metros ? Y todo esto sin perder de vista la riqueza paisajística que también es valor patrimonial . En octubre del 2019 hicimos una visita monográfica al Molino de Caparroso con uno de los arquitectos que había trabajado en el proyecto de restauración. Toda la información, sobre aquella visita y enlaces de interés podéis encontrarlos aquí
El Molino de Caparroso, hoy restaurante y escuela de piragüismo, tiene una preciosa historia, se salvó de la ruina, y hoy se ve y se entiende de muy distinta manera según desde el punto desde el que se le mire. Esto dicho tanto a lo que se refiere al punto del espacio desde donde uno lo observe, como al punto de vista que uno tenga sobre la restauración. En cualquier caso, lo salvaron de la ruina. Aquí va una foto de la web de Bruguera y Jabat en la que se ve el estado en el que estaba el Molino de Caparroso
Estábamos con un público muy joven y lo que hicimos fue centrarnos en algunas preguntas. ¿Has estado aquí alguna vez? ¿ Te han contado o te has preguntado tú que pudo ser este lugar antes de la escuela de piragüismo?
Sí que habían estado, la mayoría haciendo actividades de piragüismo con el colegio, pero ninguno había tenido la curiosidad de saber qué podía haber sido aquello con una chimenea… ¡Ay este sistema de enseñanza que mata la curiosidad por saber, la capacidad de observar! También el uso temprano de pantallas y el uso abusivo de las mismas resta esa capacidad de contemplación y eso que estamos ante unas vistas sugerentes y en pleno corazón de Pamplona.
Una breve pincelada sobre la historia de este edificio y alguna consideración sobre el prisma actual que sirve para albergar un restaurante con preciosas vistas al rio. Eso fue lo que hicimos aquí. Y es verdad que desde algún punto, no se entiende bien este edificio y aquí va una prueba
Por eso también nos acercamos a ver algún detalle como una antigua puerta con arco apuntado y donde se aprecia que «algo falta» en la parte superior. De ello hablo en el post del 19 del que he dejado el enlace arriba. Con uno de los mas peques miramos a ver qué nos parecía viejo o nuevo. Sus observaciones fueron muy divertidas y lúcidas. Daban buena cuenta de la perspectiva de las miradas según las edades.
Dar pinceladas, hacer alguna pregunta y seguir. No se podía perder de vista que hacía frío y que la actividad estaba dirigida a los más jóvenes del grupo.
Por las ramas caídas y por la lluvia, teníamos cerrada la pasarela que da acceso al otro lado del río. No hubiéramos tenido un paisaje de verano como el de la siguiente foto, pero sí que la perspectiva tan distinta hubiera sido interesante. Por ello, animé a todos a que en algún momento pasearan por allí y lo comprobaran. Aquí va otra vez una foto de la web de Brugera y Jabat
Si estáis en Pamplona, os animamos a comer un día en ese restaurante con vistas al rio.
En el paso por el Puente de la Magdalena nos llevó a recordar que estábamos en pleno Camino de Santiago y observar los dos cruceros, uno a cada lado del puente.
Este de arriba, foto de Berta Guindano, es uno de los llamados de «término» y fue puesto por el ayuntamiento de Pamplona en los años 40 del pasado siglo.
Una extraña visita al convento de las josefinas
Era el otro punto de la visita. Un edificio construído en estilo neo-gótico, un lugar con arraigo en el barrio de la Magdalena y con mucha historia pues en origen hubo allí una leprosería. En el mes de julio, personas vinculadas con el barrio y el entorno suelen celebrar en ese convento el día de la santa.
Fui hace meses a presentarme y a presentar el proyecto y pedí permiso para hacer una visita a la iglesia. Luego avisé por teléfono sobre nuestra llegada en torno a las 12.00 el día 3 de enero. Todo parecía ir bien. Ya en la puerta, nos dijeron que no íbamos a entrar. Insistí en ver a la superiora y explicar la situación y recordar lo hablado ( habían sido otras religiosas, que ya no estaban y por eso ella no tenía noticia) Al final dieron permiso para que pasaran unos pocos y elegimos a los más jóvenes del grupo.
Es un espacio sencillo pero con un gran encanto, una capilla por decirlo así, romántica. Y es una delicia el peculiar Calvario que además de contar con las tradicionales imágenes de la Virgen y San Juan, tiene una deliciosa Magdalena a los pies
Tras fijarnos en la fachada, nos fuimos a ver , o mejor dicho, intentar ver y adivinar qué había en torno a una noria de sangre.
Un hallazgo arqueológico que no se entiende
No se ve nada, solo hierbas que han crecido y hay un cartel al lado del conjunto. Si este hallazgo eran tan especial ¿ no se podía haber presentado de otra forma? A nosotros nos sirvió para hacer algunas reflexiones, hablar de este tipo de norias y analizar qué sabemos, qué nos interesa mirar, qué pasa desapercibido y en algunos casos, este es uno muy claro, con muchas razones para pasar desapercibido
Ya se hizo eco la prensa de este problema en torno a la noria de sangre de Pamplona. Se puede leer el artículo aquí
Gracias a todos por haber hecho el esfuerzo de venir en una mañana tan fría y lluviosa.
Seguimos adelante.