Comenzamos el año en San Gregorio Ostiense
Cada año antes de que terminen las fiestas de Navidad, tenemos un pequeño encuentro. Antes de la pandemia, era un clásico coger un Regional- expres y viajar desde Pamplona a Vitoria viendo la cencellada en los campos navarros y alaveses. Qué bien nos los pasamos y qué recuerdos quedan. En los humedales de Salburua
En el Museo de BBAA de Vitoria
Ahí están los enlaces para recordar aquellos días.
Cuando todo cambió, nos adaptamos a las circusntancias pero no dejamos de reunirnos como pudimos Paseos en Navidad
2024 ha comenzado en San Gregorio Ostiense. En este enlace hay una amplia y amena explicación sobre el lugar y su historia
El mayor riesgo para el patrimonio cultural es desconocerlo
Cierto es que pueden ser muy necesarias las restauraciones aquí y allí que puede haber muchos problemas por resolver o asuntos por mejorar, pero como siempre y como vengo repitiendo machaconamente todo pasa por la difusión entre las nuevas generaciones. De nada sirve mejorar a un enfermo si luego no hay nadie que le pueda reconfortar y acompañarle no solo en la convalecencia sino en su nueva vida.
Todos se llevaron una sorpresa ante la monumentalidad de San Gregorio, las vistas y paisajes alrededor, su localización y también su estado. Es una mezcla de magnificencia y decadencia y aún así resulta grandioso. Agradecimos todos mucho a Germán Martínez y a Donato Ochoa la disponibilidad que tuvieron con nosotros para facilitarnos todo en esta mañana de excursión.
Como siempre hubo momentos entrañables como la firma en el libro de visitas. Aquí están Clara Ruiz Ullate y María Odériz firmando .
También y como no puede faltar en Patrimonio para jóvenes el momento «curioseo» de entrar por rincones y puertas, ver cómo están las cosas, tratar de comprender a través de la mirada y la exploración qué paso, qué pasa y qué hay que hacer ahora.
Y después Zúñiga
Qué descubrimiento de pueblo. Nos lo habían dicho en Piedramillera hablando sobre retablos. No dejéis de visitar Zúñiga , nos dijeron, y efectimante merece la pena. Sus paisajes, sus calles, sus rutas de senderismo y efectivamente su retablo que como tantos en esa zona impactan. Piedramillera, Lapoblación, Genevilla, El Busto…
Algunos de estos lugares ya los hemos visitado, otros los tenemos en la lista de pendientes. De momento aquí nos tenéis dando vida a las calles de Zuñiga y disfrutando de la buena conversación y el reencuentro. Tuvimos la suerte de poder reunir a casi todo el grupo que participó en las jorandas de voluntariado en el Monasterio de San Pedro de Cardeña el pasado verano . Podéis recordar esos días aquí
Del retablo de Zúñiga me cautivó una imagen de una Virgen Peregrina, una virgen que me recordaba en algunos elementos a la representación de la Divina Pastora. La luz del lugar, los colores del retablo, las escenas, todos los elementos daban como resultado una atmósfera entrañable.
Nos fuimos con ganas de volver y pasar un día entero, caminar por el entorno y una vez mas disfrutar tando vida al patrimonio. Gracias Donato por tu compañía aquella mañana tan preciosa. Y gracias Pablo Beorlegui por tus fotografías.